Translate

sábado, 8 de noviembre de 2014

Miomas uterinos durante el embarazo

Miomas uterinos durante el embarazo

Entre el 0,5 y el 4% de los embarazos coinciden con  miomas, que suelen ser únicos pero han de ser evaluados, ya que durante la gesta ción los miomas suelen crecer, están suje tos a mayor número de complicaciones, y pueden alterar el desarrollo del embarazo y el curso del parto. Parece que el factor hormonal placentario favore ce el crecimiento de los miomas durante la gesta ción, pero solo ocurre en el 20% de los casos.
La existencia del mioma puede ser conocida antes del embarazo. El diagnóstico del mioma, así como de su crecimiento, se realiza por exploración física y por ultrasonido, como en los casos en que se producen fuera de la gestación.
Miomas uterinos durante el embarazo
Durante la exploración habitual de la embara zada podría sospecharse la existencia de miomas cuando el útero es mayor que el correspondiente al tiempo de gestación, y en algunos casos mediante la palpación de los mismos.
La ecografía, que hoy es un método de rutina, permite ver el número y tamaño de los miomas y precisar su localización, y la evolución durante la gestación. En casos especialmente difíciles puede emplearse la resonancia magnética nuclear, ya que es inocua para el feto, y podría permitir un diagnóstico más preciso.
 

Evolución del embarazo, parto y puerperio

Los miomas, incluso los que son muy voluminosos, son compatibles con embara zos y partos normales, pero lógicamente pueden aparecer complicaciones en cualquiera de los tres trimestres de la gestación, en el parto, y después del mismo. Miomas uterinos durante el embarazo

Complicaciones en la gestación

Es mayor la incidencia de abortos por las dificultades que tiene el óvulo fecundado para implantarse en el útero.
  • Incremento de partos prematuros (por la misma razón que en el caso anterior).
  • Puede alterarse el desarrollo fetal.
  • Pueden producirse degeneraciones del mioma, así como modificarse la localización de este.

Complicaciones en el parto

  • Hemorragias.
  • Alteraciones en el expulsivo, si el mioma obstruye el canal del parto.
  • Alteraciones en la contractibilidad del útero.
  • Alteraciones en la presentación del feto.

Evolución tras el embarazo

Los miomas casi siempre disminuyen sensiblemente de tamaño, hasta casi desaparecer, con la involución del útero tras el parto. Si esto no sucede así, habrá que valorar la posibilidad de eliminarlos antes de una nueva gestación.

Tratamiento de los miomas durante el embarazo

Durante el embarazo la conducta debe ser expec tante, interviniéndose solo en caso de fuerza ma yor, siempre de manera conservadora, es decir, de la forma menos invasiva posible, para no afectar a la evolución de la gestación.
En el parto hay un incremento del número de cesáreas debido a alteraciones en la dinámica uterina (es decir, a las contracciones), al aumento de placentas previas y alteraciones en la posición del feto y a obstrucciones del canal del parto, como se ha comentado.